El tiempo - puede ser- sinó
un extraño que para hablarlo sólo
se deja a través de otros,
-como un avaro o la coqueta figura
de una nadie transformada
en alguien con Título y Nombre-.
la pupila del gato que agazapado y
en recuerdo de sus garras,
ensombrece el ojo todo
en la proyección de su presa.
- ese gesto por lo menos dice
por más de cautiverio tenga -
el rasgo de la noche congelado
en la luz de un invierno - y sus
tres meses - endureciendo
el silencio y las palmas de las manos.
- y ese gesto también dice,
porque ¿cuál de todos está incapacitado
de la palabra? -
Y en la vuelta se completa una frase
- el tiempo susurra y ofece
pero tiene el enorme estandarte de la mudez
subyugándolo -
No hay comentarios:
Publicar un comentario